(Se mantiene la ortografía de la época)
Respuesta á las cartas de Agustin de Zárate de 8, 9 y 28 de marzo de 1556, sobre el estado y negocios de las minas.
Contadurías generales, núm. 3072
9 de abril de 1556
EL REY.- Agustin de Zárate, mi criado: Ví vuestras cartas de ocho y nueve, y veinte y ocho del pasado, y por cierto es de dar gracias á Dios por tantas muestras y señales tan ricas como de cada dia se van descubriendo en esas minas, y por las otras que de nuevo han parecido en Aracena y Cazalla y Constantina y Valverde, y en otra partes desa comarca que todas son de gran estima y valor según vuestra relacion, y así he holgado mucho de todas las particularidades que dellas me escribía y especialmentede la mineta que Claudio (1)(Aleman, capataz de uno de los pozos: llamábase Claudio Mxxxxx) ha hallado al lado de las de Martin Delgado; y pues decis que va ocho pasos apartada dellas, y que se tiene por distinta de las otras, y en tal caso pdria ser que no hubiese de llevar parte della el dicho Martin Delgado, hareis que se beneficie de por sí y se tenga cuenta y razon aparte de todo lo que della procediere y del gasto que en ello se hiciere; y á Claudio dareis cincuenta ducados por las albricias que os pidió, y brevemente se enviarán personas que beneficien las de Aracena y Valverde que están embargadas; y para que embragueis las de Cazalla y las otras que se han hallado y hallare, se os envia la cédula que vereis: proveeréis luego que así se haga, y avisareis de lo que por ella se os manda.
De la traida de los alemanes que escribis que deben venir para fabricar todas esas minas, se tendrá especial cuidado, porque me parece que se podrán bien emplear en ellas, pues son tran provechosos y fieles como decís, y á Joan de Xuren se escribe la carta que vereis para os envie luego los que tuviere. Enviargela heis en llegando este correo, y hareis mucha instancia en que vengan ahí con toda brevedad, especialmente los fundidores, pues hacen tanta falta por haberse ido los dos que vinieron, y enviarme heis su respuesta, así para saber lo que hace en enviar ahí los alemanes, como para el aviso y cartas y rédito para la traida de los otros: y si los alemanes que están ahí y los que mas os ha de enviar Joan de Xure tuvieren conocimiento con algunos de los que se han de traer de Alemania, será bien quellos les escriban dándoles á entender la riqueza desas minas y como se podrán ocupar bien en ellas, y el buen tratamiento que se le hará, para inclinarlos á que vengan mas presto y con mejor voluntdad, y enviarme heis estas caartas.
Pues Dios provee de tanta abundancia de metal, debeis de tener muy especial cuidado de que se cave, saque todo lo mas que se pudiere cavar y sacar hasta el mes de octubre, para que, demas de lo que se fundiere y afinare hasta alli, quede metal para poder fundir y afinar en los dias de invierno, pues entonces por el frio y humedad y aguas, no se podrá cavar ni sacar: para que se continúe la fábrica en las fundiciones y afinaciones, y no falte el provecho dellas, pues es mas necesario de lo que se os puede sinificar; y para que se haga con mas recaudo y fidelidad, mezclareis los alemanes con los naturales de acá; y si en esto hubiere algun inconveniente, proveerlo heis como mas convenga; y ver su demas de los de Azuaya y Hornachos sería bien procurarde traer otra gente de las otras partes donde ha habido y hay minas, y de los que hacen pozos, para que en esas minas se meta toda la mas gente que pudiere andar en ellas, y que ahonden los pozos que están comenzados hasta dar en el metal, de manera que se saque por todas las mas partes que ser pueda agora en verano para que se fabrique en el invierno, como está dicho: y tenerse ha cuenta como está ordenado de lo de cada hallador por su parte; y no consintais que los dichos halladores ni otras personas en su nombre caven los dichos pozos.
Debeis daros priesa á que se acaben los edificios de la casa para pasaros á ella con loas fuslinas lo mas presto que ser pueda, pues conviene tanto para el buen recaudo de la hacienda; y para excusar los frecuentes hurtos, hareis en ella todos los edificios que fueren necesarios, como á vos o pareciere, que con vuestras libranzas mandaré recibir en cuenta todo lo que en ello se gastare á los depositarios en quien lo libráredes.
Habeis hecho muy bien en hacer arredrar los bodegones de la fábrica, y siempre tendreis cuidado de hacerlos visitar á menudo, y de mirar que los que vinieren con bestias á traer bastimentos no saquen ni lleven ningun metal, y que haya guarda de confianza que mire esto, pues diendo el metal tanrico, en pequeña cantidad pueden hurtar mucho.
Si no hubiéredes ejecutado lo que tengo escrito sobre los metales que tienen cerca de las minas los de Hornachos y Azuaga, hacerlo heis llevar luego á la hora sin que quede ahí nada dellos, tomando la parte que me pertenece, porque ha sido descuido dejargelos tener ahí.
No consintireis que una legua a la redodnda desas minas andre ninguno á buscarlas ni descubrirlas; y hacerlo heis asi pregonar en Guadalcanal y en otros lugaresde lacomarca, sopena que las hayan pertlido, y queden aplicadas para Mí, y dareis orden como algunas personas plátiese en esto las busquen a mí costa y para Mí, pagándoles desa hacienda loo que huvieren de haber, y avisarme heis de lo que en ello se hiciere, y lo mismo preveereis en lo de las minas de Cazalla y Constantina y otros lugares de tierra de Sevilla, y en las otras que se hubieren hallado en aquellas comarcas.
Para lo de la madera se os envian las cédulas que vereis: todavía se haga con Sevilla diligencia primero que se use de la de Constantina, porque si lo proveyere, como tengo por cierto que lo hará, es bien escusar la de Constantina, y si no usareis della; de tal manera que no haya ninguna falta de madera en esa fábrica, pues es tan necesaria y conveniente para ella: y para lo del carbon se os envia tambien la cédula que vereis. Procurareis que haya abundancia dello, asi para el verano, como para lo que hubiere de fabricar en el invierno.
Sobre lo de las licencias para las fiestas se ha escrito oal Arzobispo de Sevilla y al Prior de san Marcos de Leon. Por cierto tengo que las darán, y luego se os enviarán.
La pintura de las minas con la descripción dellas vino muy buena, y he holgado de entender como son, y de ver las muestras de los nuevos metales que me habeis enviado, enlos cuales se juzga bien lo que son. Dios lo lleve adelante.
Habeis hecho muy bien en enviarme la relacion de la orden que se tiene en la fábrica y de los gastos della, y paréceme que teneis bastante ocupacion en lo de ahí, y siempre mirareis en lo que es menester añadir ó quitar, y remediar para el bien desa fábrica y gasto della, y me avisareis de lo que de nuevo acordáredes; y teneis razon de estimar en mucho lo que hizo el aleman de sacar el metal para los seis mil ducados en menos de dos horas: Por todas partes se verifica la mucha riqueza desa hacienda, y por tanto es menester poner mayor recaudo en ella.
Con Martin Delgado ni los demas que han venido, no se ha hecho acá nada, y vos decis muy bien que se le vaya dando poco á poco lo que se le hubiere de dar, porque sus deudos ge lo gastarán, y lo que se le diere por via de concierto, será bien vinculárgelo para que no ge lo gasten; y aquí se le dirá que cuando fuere á las minas, vaya solo con un mozo, y no lleva mas compañía, y vos no consintais allá que se haga otra cosa, y la misma orden debeis tener con los otros halladores y descubridores y porcioneros dellas.
Todos los pertrechos y materiales de hierro y acero, y maromas, cáñamo, cueros, sogas, espuertas, esportillas, serones, clavazon y otras cualesquier menudencias que sean necesarias para esa fábrica, hacerlas heis comprar y tener por junto como decis que lo proveeis, y diputareis una persona para que lo reciba y tenga todo en su poder, haciéndole cargo dello, de cada género de cosas por su parte, y él irá dando todo lo que fuere menester para la dicha fábrica por la orden que vos le diéredes, y asentará todo lo que fuere dando lo de cada género por sí, sin tomar recaudo ni conocimiento de las personas á quien lo diere, y vos ireis viendo la cuenta desto de dos á tres dias, y le señalareis lo que hubiere dado, y con solo este recaudo y su juramento tengo por bien que le sea recibido en cuenta: y mirareis que los pertrechos y cosas que el hubiera dado, se guarden y aprovechen lo mas que se pueda por los trabadores y personas que los recibieron, y que cuando no fueren menester, se recojan los que fueren de provecho para que después tornen á servir.
Los pozos donde decís que se meten y encubren los ladrones, si fueren inútiles, hacerlos heis cegar.
Al dueño de la casa donde posastes dareis de alquiler, y lo que trabajó en ayudaros, los nueve mil maravedis que escribis, y de los materiales que hubiéredes gastado en los edificios de la cada de la encomienda, no hay para los quiteis della, si no conviniere para mejoría de los aposentos que en lla solia haber, y de los que vos habeis hecho.
En lo que decis sobre las partidas y jornales de Gonzalo Yañes y Rodrigo Yañez, y del sobrino de Martin Delgado, guardareis la orden que os está dada.
Sobre la labor de la moneda de la plata que de ahí enviais á Sevilla, se os envia la cédula que vereis para el alcalde Salazar. Y mando que toeme la razon deste Francisco de Almaguer mi contador. Fecha en Valladolid á nueve dias del mes de abril de mil quinientos y cincuenta y seis años.- La Princesa.- Por mandado de su Magestad, su Alteza en su nombre.- Juan Vazquez.- Señalada de los del consejo de la hacienda de su Magestad.
Contadurías generales, núm. 3072
9 de abril de 1556
EL REY.- Agustin de Zárate, mi criado: Ví vuestras cartas de ocho y nueve, y veinte y ocho del pasado, y por cierto es de dar gracias á Dios por tantas muestras y señales tan ricas como de cada dia se van descubriendo en esas minas, y por las otras que de nuevo han parecido en Aracena y Cazalla y Constantina y Valverde, y en otra partes desa comarca que todas son de gran estima y valor según vuestra relacion, y así he holgado mucho de todas las particularidades que dellas me escribía y especialmentede la mineta que Claudio (1)(Aleman, capataz de uno de los pozos: llamábase Claudio Mxxxxx) ha hallado al lado de las de Martin Delgado; y pues decis que va ocho pasos apartada dellas, y que se tiene por distinta de las otras, y en tal caso pdria ser que no hubiese de llevar parte della el dicho Martin Delgado, hareis que se beneficie de por sí y se tenga cuenta y razon aparte de todo lo que della procediere y del gasto que en ello se hiciere; y á Claudio dareis cincuenta ducados por las albricias que os pidió, y brevemente se enviarán personas que beneficien las de Aracena y Valverde que están embargadas; y para que embragueis las de Cazalla y las otras que se han hallado y hallare, se os envia la cédula que vereis: proveeréis luego que así se haga, y avisareis de lo que por ella se os manda.
De la traida de los alemanes que escribis que deben venir para fabricar todas esas minas, se tendrá especial cuidado, porque me parece que se podrán bien emplear en ellas, pues son tran provechosos y fieles como decís, y á Joan de Xuren se escribe la carta que vereis para os envie luego los que tuviere. Enviargela heis en llegando este correo, y hareis mucha instancia en que vengan ahí con toda brevedad, especialmente los fundidores, pues hacen tanta falta por haberse ido los dos que vinieron, y enviarme heis su respuesta, así para saber lo que hace en enviar ahí los alemanes, como para el aviso y cartas y rédito para la traida de los otros: y si los alemanes que están ahí y los que mas os ha de enviar Joan de Xure tuvieren conocimiento con algunos de los que se han de traer de Alemania, será bien quellos les escriban dándoles á entender la riqueza desas minas y como se podrán ocupar bien en ellas, y el buen tratamiento que se le hará, para inclinarlos á que vengan mas presto y con mejor voluntdad, y enviarme heis estas caartas.
Pues Dios provee de tanta abundancia de metal, debeis de tener muy especial cuidado de que se cave, saque todo lo mas que se pudiere cavar y sacar hasta el mes de octubre, para que, demas de lo que se fundiere y afinare hasta alli, quede metal para poder fundir y afinar en los dias de invierno, pues entonces por el frio y humedad y aguas, no se podrá cavar ni sacar: para que se continúe la fábrica en las fundiciones y afinaciones, y no falte el provecho dellas, pues es mas necesario de lo que se os puede sinificar; y para que se haga con mas recaudo y fidelidad, mezclareis los alemanes con los naturales de acá; y si en esto hubiere algun inconveniente, proveerlo heis como mas convenga; y ver su demas de los de Azuaya y Hornachos sería bien procurarde traer otra gente de las otras partes donde ha habido y hay minas, y de los que hacen pozos, para que en esas minas se meta toda la mas gente que pudiere andar en ellas, y que ahonden los pozos que están comenzados hasta dar en el metal, de manera que se saque por todas las mas partes que ser pueda agora en verano para que se fabrique en el invierno, como está dicho: y tenerse ha cuenta como está ordenado de lo de cada hallador por su parte; y no consintais que los dichos halladores ni otras personas en su nombre caven los dichos pozos.
Debeis daros priesa á que se acaben los edificios de la casa para pasaros á ella con loas fuslinas lo mas presto que ser pueda, pues conviene tanto para el buen recaudo de la hacienda; y para excusar los frecuentes hurtos, hareis en ella todos los edificios que fueren necesarios, como á vos o pareciere, que con vuestras libranzas mandaré recibir en cuenta todo lo que en ello se gastare á los depositarios en quien lo libráredes.
Habeis hecho muy bien en hacer arredrar los bodegones de la fábrica, y siempre tendreis cuidado de hacerlos visitar á menudo, y de mirar que los que vinieren con bestias á traer bastimentos no saquen ni lleven ningun metal, y que haya guarda de confianza que mire esto, pues diendo el metal tanrico, en pequeña cantidad pueden hurtar mucho.
Si no hubiéredes ejecutado lo que tengo escrito sobre los metales que tienen cerca de las minas los de Hornachos y Azuaga, hacerlo heis llevar luego á la hora sin que quede ahí nada dellos, tomando la parte que me pertenece, porque ha sido descuido dejargelos tener ahí.
No consintireis que una legua a la redodnda desas minas andre ninguno á buscarlas ni descubrirlas; y hacerlo heis asi pregonar en Guadalcanal y en otros lugaresde lacomarca, sopena que las hayan pertlido, y queden aplicadas para Mí, y dareis orden como algunas personas plátiese en esto las busquen a mí costa y para Mí, pagándoles desa hacienda loo que huvieren de haber, y avisarme heis de lo que en ello se hiciere, y lo mismo preveereis en lo de las minas de Cazalla y Constantina y otros lugares de tierra de Sevilla, y en las otras que se hubieren hallado en aquellas comarcas.
Para lo de la madera se os envian las cédulas que vereis: todavía se haga con Sevilla diligencia primero que se use de la de Constantina, porque si lo proveyere, como tengo por cierto que lo hará, es bien escusar la de Constantina, y si no usareis della; de tal manera que no haya ninguna falta de madera en esa fábrica, pues es tan necesaria y conveniente para ella: y para lo del carbon se os envia tambien la cédula que vereis. Procurareis que haya abundancia dello, asi para el verano, como para lo que hubiere de fabricar en el invierno.
Sobre lo de las licencias para las fiestas se ha escrito oal Arzobispo de Sevilla y al Prior de san Marcos de Leon. Por cierto tengo que las darán, y luego se os enviarán.
La pintura de las minas con la descripción dellas vino muy buena, y he holgado de entender como son, y de ver las muestras de los nuevos metales que me habeis enviado, enlos cuales se juzga bien lo que son. Dios lo lleve adelante.
Habeis hecho muy bien en enviarme la relacion de la orden que se tiene en la fábrica y de los gastos della, y paréceme que teneis bastante ocupacion en lo de ahí, y siempre mirareis en lo que es menester añadir ó quitar, y remediar para el bien desa fábrica y gasto della, y me avisareis de lo que de nuevo acordáredes; y teneis razon de estimar en mucho lo que hizo el aleman de sacar el metal para los seis mil ducados en menos de dos horas: Por todas partes se verifica la mucha riqueza desa hacienda, y por tanto es menester poner mayor recaudo en ella.
Con Martin Delgado ni los demas que han venido, no se ha hecho acá nada, y vos decis muy bien que se le vaya dando poco á poco lo que se le hubiere de dar, porque sus deudos ge lo gastarán, y lo que se le diere por via de concierto, será bien vinculárgelo para que no ge lo gasten; y aquí se le dirá que cuando fuere á las minas, vaya solo con un mozo, y no lleva mas compañía, y vos no consintais allá que se haga otra cosa, y la misma orden debeis tener con los otros halladores y descubridores y porcioneros dellas.
Todos los pertrechos y materiales de hierro y acero, y maromas, cáñamo, cueros, sogas, espuertas, esportillas, serones, clavazon y otras cualesquier menudencias que sean necesarias para esa fábrica, hacerlas heis comprar y tener por junto como decis que lo proveeis, y diputareis una persona para que lo reciba y tenga todo en su poder, haciéndole cargo dello, de cada género de cosas por su parte, y él irá dando todo lo que fuere menester para la dicha fábrica por la orden que vos le diéredes, y asentará todo lo que fuere dando lo de cada género por sí, sin tomar recaudo ni conocimiento de las personas á quien lo diere, y vos ireis viendo la cuenta desto de dos á tres dias, y le señalareis lo que hubiere dado, y con solo este recaudo y su juramento tengo por bien que le sea recibido en cuenta: y mirareis que los pertrechos y cosas que el hubiera dado, se guarden y aprovechen lo mas que se pueda por los trabadores y personas que los recibieron, y que cuando no fueren menester, se recojan los que fueren de provecho para que después tornen á servir.
Los pozos donde decís que se meten y encubren los ladrones, si fueren inútiles, hacerlos heis cegar.
Al dueño de la casa donde posastes dareis de alquiler, y lo que trabajó en ayudaros, los nueve mil maravedis que escribis, y de los materiales que hubiéredes gastado en los edificios de la cada de la encomienda, no hay para los quiteis della, si no conviniere para mejoría de los aposentos que en lla solia haber, y de los que vos habeis hecho.
En lo que decis sobre las partidas y jornales de Gonzalo Yañes y Rodrigo Yañez, y del sobrino de Martin Delgado, guardareis la orden que os está dada.
Sobre la labor de la moneda de la plata que de ahí enviais á Sevilla, se os envia la cédula que vereis para el alcalde Salazar. Y mando que toeme la razon deste Francisco de Almaguer mi contador. Fecha en Valladolid á nueve dias del mes de abril de mil quinientos y cincuenta y seis años.- La Princesa.- Por mandado de su Magestad, su Alteza en su nombre.- Juan Vazquez.- Señalada de los del consejo de la hacienda de su Magestad.