domingo, 23 de febrero de 2014

HISTORIA SOBRE UNA REVISTA DE FERIA DE 1946

Portada original de la Revista cedida por Salvador Isern
Hace unos días, nuestra amiga Mª José Serna Blanco, nos sorprendía en Facebook con la portada de una Revista de Feria de Guadalcanal del año 1946. La mayor parte de la publicación está dedicada a una investigación sobre Ortega Valencia y el descubrimiento de una isla en el Pacífico, a la que nuestro ilustre paisano puso el nombre de Guadalcanal.
A veces resulta curioso las casualidades que se pueden producir, para que una simple portada de una Revista de Feria de Guadalcanal, lleve consigo una serie de descubrimientos.
Lo primero que observamos en la portada de inicio del reportaje sobre Ortega Valencia, es el nombre del autor, Francisco Ruiz Pelayo, que según pone "...ha efectuado una labor de investigación, pacientemente realizada por el exvecino de esta villa..." Aquí encontramos el primer dato misterioso, ya que según hemos podido investigar en los Archivos Municipales, el citado vecino no aparece como tal, en los años anteriores ni posteriores a la publicación de este trabajado reportaje.
Coincidiendo en el tiempo actual con la aparición de la portada de la Revista, resulta que he trasladado el resto de los libros de mi biblioteca que tenía en Miajadas a Guadalcanal, y entre ellos, venía una de las múltiples ediciones del “El Contador de Sombras”, de Antonio Burgos, en este caso el editado por Ediciones 29 para Discolibro del año 1972. Como hacía tiempo que no lo leía, lo he vuelto a leer, como también he hecho con el titulado “Toque de gloria, toque de agonía”, cuyo personaje central, también es de Guadalcanal. Entre las cosas que cuenta don Tomás Mora en el Contador de Sobras, leo lo siguiente en la página 201 … De tanto leer, don Yordi se encontró con que en el Pacífico había una isla que se llamaba como este pueblo, precisamente porque la había descubierto uno nacido aquí, Pedro Ortega Valencia. Se puso a pedir libros a Madrid, y no vea usted cómo se estudió la cosa, lo mismo que el que prepara un examen. Y después, cogió y en el permiso, en vez de irse a su pueblo, como había hecho otros años, y volver a Barcelona, se estuvo diez días en Sevilla para estudiar los papeles que hablaban de esto de Ortega Valencia en el Archivo de Indias. Cuando volvió, no vea usted la de fotocopias de documentos que traía y lo bien que los leía, aunque estaban escritos con la misma letra del archivo de la parroquia…” . Sigue divagando el personaje de Antonio Burgos, pero curiosamente habla de fotocopias de documentos que trajo del Archivo de Indias y lo bien que los leía.
Intrigado con estos datos, y aunque Antonio Burgos lo nombra como Jorge Rovira, este nombre me hizo pensar que el personaje real de su libro debía de ser catalán, por el nombre y apellido con que le nombra, tan usuales en Cataluña.
Me puse en contacto con Mª José Serna, que amablemente me dejó la Revista y entre otros artículos, estaba el de Ortega Valencia y curiosamente con fotocopias de documentos del Archivo de Indias. Por lo tanto, el personaje de Antonio Burgos y Francisco Ruiz Pelayo eran la misma persona.
Como me ha ocurrido otras veces, cuando me encuentro atascado, acudo a mi amigo José Mª Álvarez Blanco (el hijo de Pepe el de la tienda, cuyo padre también aparece como personaje en el Contador de Sombras), que es el que más sabe de cosas de Guadalcanal. No tardó treinta segundos en decirme el nombre del verdadero autor del amplio artículo de Ortega Valencia y las vicisitudes de la historia del artículo.
Anotado por mí el nombre del autor, he aprovechado los trabajos que estoy realizado para la Historia de Guadalcanal del Siglo XX y he encontrado algunas cosas que me confirman lo que mi amigo Pepe Álvarez me dijo.
Lo primero que encuentro, es que yo ya sabía el nombre del personaje del escritor sevillano, aunque posiblemente por mis años, lo había olvidado. En una entrevista que realicé a Salvador Isern el año 2009, entre otras, le hice la siguiente pregunta: “…Leyendo el libro de Antonio Burgos “El Contador de Sombras” me imagino a su padre, como el personaje de Don Yordi…
- El personaje de Don Yordi como lo describe Antonio Burgos en su libro, no es fiel reflejo de la realidad. Don Joaquín nunca ocupó cargo alguno de concejal y menos fue administrador de correos, si es cierto que investigó largo tiempo en el archivo de Indias y en el de Simancas de donde sacó mucha información que fue publicada en la revista de Feria. Fue el primero en divulgar el descubrimiento de la isla de Guadalcanal por Don Pedro Ortega Valencia en el archipiélago Salomón, también es cierto que luchó junto a Don Francisco Oliva, que fue alcalde, para que se rindiera homenaje a Don Pedro Ortega…”
Joaquín Isern con traje oscuro y gafas, en la primera misa que celebró el fraile guadalcanalense Rafael Calado, antiguo empleado de su farmacia.
            Efectivamente don Joaquín Isern Fabra, no cabe duda de que es el autor del artículo de Pedro Ortega Valencia, ya que por la fecha que se escribió, él estaba ejerciendo de farmacéutico en Guadalcanal, como también lo hizo en Barcelona, Andorra, Sanlúcar de Barrameda,  y la población barcelonesa de Parets del Vallés, donde se jubiló el año 1985. Cuando en 1964 se realizó el primer homenaje a Ortega Valencia, aunque ya no vivía en Guadalcanal, fue invitado expresamente por el alcalde Francisco Oliva, según pueden ver en el escrito que figura bajo estas líneas y la copia del telegrama que también insertamos.


            Agradecemos a Salvador Isern los originales enviados de la portada y contraportada de la Revista y la ampliación que nos hace de las peripecias de su padre que resumimos a continuación: "...Mi padre, catalán de Gerona de 1,96  de altura, sin raíces en el pueblo, era un misterio, la guardia civil pidió informes, sabían que estuvo en la cárcel, en Sanlucar de Barrameda en 1938 por hacer unos calendarios contra el Régimen de Franco; en su  condición de Carlista. Su marcha de Cataluña se debió a la  persecución para matarlo, igual que hicieron con su suegro, que lo asesinaron por la espalda, "solo por ser católicos."
 Como bien sabes, la segunda guerra mundial finalizo el 2-9-1945 y la batalla de Guadalcanal 9-2-1943, fue entonces cuando el nombre de Guadalcanal salto a los medios de comunicación principalmente la radio y muchos tuvieron conocimiento de la existencia de la isla de Guadalcanal.
 Como bien dices la revista de feria de 1946, fue mi padre el autor de todo, las fotos, los reportajes y la impresión de las planchas sacadas del archivo de Indias, (que aun conservo y que le costo un pastón) el seudónimo de Francisco Ruiz Pelayo, fue  inventado, para no tener problemas ni todo el protagonismo..."

            A continuación les ofrecemos en tres capítulos el artículo de don Joaquín Isern, aunque en su día figurara como autor don Francisco Ruiz Pelayo.

Por último quisiera animar a mis improbables lectores, para que dieran a la luz esas pequeñas historias, que cómo ésta, ha salido de una simple portada o puede nacer de una fotografía antigua de algún familiar.

No hay comentarios: