viernes, 13 de marzo de 2015

EL VIAJE DE WILLIAM BOWLES DESDE ALMADÉN A GUADALCANAL, EN 1752, PARA VISITAR LA MINA DE POZO-RICO Y EL RELATO SOBRE SU ESTADO (1 de 4)


Por José Mª Álvarez Blanco – Revista Guadalcanal año 2014

            Hace un par de años durante el mes de junio, y en el transcurso de un viaje a la República de Irlanda, visité la ciudad de Cork, muy conocida por los aficionados al whisky por estar allí radicada la factoría de esa bebida de la marca Jameson. No sé cuantos nacidos en Guadalcanal me habían precedido en la visita, pero lo cierto es que a la inversa, esto es, un natural de la ciudad había venido a Guadalcanal hace más de 250 años, concretamente en 1752. Me refiero al naturalista, nacido hacia 1714-1715, William Bowles que vino a nuestro pueblo desde Almadén, siendo su objeto conocer la célebre mina de plata de Pozo Rico. Pero antes de transcribir su viaje veamos algunos datos sobre su vida que, a diferencia de George Borrow (que estuvo en nuestro país entre 1835 y 1840), vino a traernos la doctrina de la ciencia, y desarrollo tecnológico de la que fue un ferviente apóstol, y de la que tanto estábamos necesitados y, lamentablemente, seguimos necesitando, y así nos va.
              Las noticias que tenemos es que estudió primeramente Derecho en Londres, disciplina que abandonó por la ciencia, y así en 1740 se encontraba en París cursando estudios de Historia Natural, Química, Metalurgia y Anatomía. Dado el carácter experimental de dichas materias posteriormente viajó a través de Francia y Alemania estudiando in situ Ciencias Naturales con especial atención a los minerales. Sabemos que se casó hacia 1734 con la alemana Ana Regina Runstein, natural de Hamburgo, que le acompañó en sus comisiones y que no tuvieron hijos. Residiendo ya en España, visitó Alemania, concretamente la fábrica de zafre(a) en Selva Negra con el fin de sacarle partido a la mina pirenaica de Gistau de mineral de cobalto. El objeto de la visita era estudiar la aplicación industrial de dicho mineral para el color azul de las piezas de porcelana.
            En 1752 trabó conocimiento con Antonio de Ulloa (1716-1795) que llegaría a ser Almirante de la flota española y con su compatriota Ricardo Walls, ministro de Carlos III, por cuya mediación se le nombró superintendente de las minas españolas. Se le encomendó formar un gabinete o colección de Historia Natural, y fundar un laboratorio químico para estudiar el platino y sus aleaciones. En calidad de experto en minas su mayor éxito fueron los planes que proyectó para volver a poner en marcha la producción de mercurio en la mina de Almadén que había resultado seriamente dañada por un incendio. La restauración de la producción en Almadén era una cuestión de estado, pues el mercurio era imprescindible para el beneficio de la plata en México y Perú.  El gabinete de Historia Natural del que se hizo cargo, conocido como la Casa de la Geografía, se hallaba en la calle la Magdalena de Madrid, y es el antecedente directo del Museo de Ciencias Naturales, del que Ulloa fue su primer director y Bowles su primer científico contratado.


Fruto de su dedicación y viajes por toda la península investigando las riquezas del suelo y subsuelo es su obra "Introducción a la historia natural y a la geografía física de España" aparecida en 1775, firmada, como puede verse en la reproducción adjunta, con su nombre de pila españolizado. Esta obra tuvo bastante éxito como lo prueba una segunda edición de 1782 y una tercera de 1789.
Si bien al principio tuvo una visión negativa de España, hasta el punto de declarar que; "Todos los españoles son tontos, apáticos, pobres, sucios, celosos y tristes", el tiempo le hizo cambiar de opinión y llegó a ser muy bien aceptado por la clase dirigente y por la sociedad en general. Y ello pese a que no se le dio nada bien aprender el castellano, necesitando la ayuda de sus amigos para traducir los documentos que consultaba. Para la preparación del libro antes citada contó con la ayuda de José Nicolás de Azara, que fue embajador en Roma.
También durante su larga estancia en España sus estudios le llevaron a refutar las ideas erróneas acerca de la naturaleza del platino, en el sentido de que no era una simple aleación de hierro y oro, sino un elemento químico del grupo de los metales. El platino fue descubierto por el citado Antonio de Ulloa, en Ecuador hacia 1735.
Falleció en Madrid el 25 de agosto de 1780 siendo enterrado en la céntrica iglesia de San Martín en las inmediaciones de la actual Gran Vía.
Baste con las líneas que anteceden para tener una ligera idea de la personalidad del este científico. En cuanto al viaje, cuya narración sigue, podemos observar el recorrido desde Almadén hasta Guadalcanal, que parece realizó a campo a través, en dirección norte-sur, como demuestran las coordenadas geográficas que figuran a continuación.


Población
Longitud
Latitud
Almadén
4º 49' 00” O
38º 46' 00” N
Puebla de Alcocer
5º 15' 28” O
38º 59' 06” N
Orellana
 5º 32’ 03” O
39º 0’ 19” N
Navalvillar de Pela
5º 28' 00” O
39º 05' 00” N
Logrosán
5º 29' 32” O
39º20' 14” N
Orellana la vieja (cruza el Guadiana)
5º 31' 40'' O
39º 00' 45'' N
Zalamea de la Serena
5° 38' 00” O
38° 40' 00” N
Berlanga
5º 49' 45” O
38º 16’ 58”  N
Guadalcanal
5º 49' 00”
38º 05' 00” N



No hay comentarios: